Prevenir y aliviar el sufrimiento de los pacientes que son diagnosticados con cáncer en una etapa avanzada y/o terminal, mejorando su calidad de vida y la de su entorno, es el principal objetivo de la Unidad de Cuidados Paliativos del Hospital de Quilpué, unidad que no ha dejado de atender integralmente a sus pacientes durante la pandemia, mediante video llamadas, controles y visitas domiciliarias.

Cada segundo sábado del mes de octubre se celebra el Día Mundial de los Cuidados Paliativos, programa que en el Hospital de Quilpué brinda alivio del dolor a pacientes con cánceres no progresivos, es decir cánceres que se van a mejorar pero que cursan con alguna sintomatología de dolor y a la vez, atiende a pacientes que ingresan con cáncer en etapas más avanzadas o que se encuentran en un proceso de fin de vida, a quienes se les acompaña desde el ingreso hasta su fallecimiento.

Según explicó la encargada del programa, la kinesióloga Sandra Vera, este año no se ha dejado de brindar el apoyo y los controles mensuales, no obstante ha debido cambiar la forma de trabajar, resguardando la seguridad de los pacientes, por ser de la población de alto riesgo, inmunodeprimidos y algunos de ellos con muy avanzada edad.

“Se implementó la modalidad de controles telefónicos por parte del equipo, incluso mediante video llamadas a través de la plataforma zoom, la psicóloga ha estado atendiendo a través de video llamadas, y así se brinda atención de enfermería, kine, nutrición y médico, además de visitas domiciliarias restringidas a pacientes que se encuentren descompensados. Se ha reorganizado la agenda de tal manera de seguir entregando el tratamiento farmacológico”, explicó Sandra Vera.

“Importante destacar que la atención telefónica nos ha dado un mayor espacio de comunicación con los cuidadores y hacer contención, son tiempos difíciles y muchos familiares sienten miedo debido a la pandemia, tampoco han querido trasladar al paciente al Hospital y se han buscado las estrategias para poder brindarles esas atenciones en domicilio, y que los pacientes se mantengan compensados” relató la profesional.

Así también, continua el valioso apoyo a aquellos pacientes que se encuentran en una etapa de fin de vida, acompañando a la familia y guiando el proceso, a pesar de no estar físicamente en contacto con ellos, pero el vínculo no se ha perdido.

“Este año también se ha visto un aumento de las consultas espontaneas de los pacientes que están solicitando la atención de cuidados paliativos y pidiendo a sus médicos la derivación al programa. Esa es una de las claves para poder seguir avanzando, la derivación precoz de los pacientes con cáncer a cuidados paliativos para que puedan llegar no con dolor severo, ni en etapas de postración, ni en etapas de fin de vida.

Tenemos que seguir luchando para que los pacientes sean derivados precozmente e incentivando a los pacientes que pidan a sus médicos la derivación al programa”.

Esta es una de las finalidades de la celebración del Día de los Cuidados paliativos, que la comunidad se entere que existe la opción de que pacientes con cáncer pueden ser derivados al programa para aliviarles el dolor y todos los síntomas asociados a esta dura enfermedad.