Como era de esperar, la propagación del COVID-19 en Chile llevó al IPEC a uno de sus mínimos históricos. En tan solo un mes, la confianza de los consumidores en la economía retrocedió 4,9 puntos, situándose en 27,8, el nivel más bajo observado desde marzo de 2002, fecha en la que se inició la medición mensual del indicador y uno de los más pesimistas del total de la serie histórica de 36 años (sólo superado por la Crisis Económica de 1983 y la Crisis Asiática).

El campo del IPEC de GfK Adimark se realizó entre el 4 y el 30 de marzo. Dado el avance que mostró el COVID-19 durante el periodo de medición se observa una importante caída al comparar las cifras obtenidas antes y después del día 16 (primer día hábil desde que el gobierno comunicó las primeras medidas para detener la propagación del virus como la suspensión de clases). Así, el IPEC pasó de 29,5 puntos a 26,1 (-3,4) durante la última quincena de marzo y es esperable que siga manteniéndose en esos rangos en los próximos meses.

Con el dato de marzo, el IPEC completa 20 meses en la zona pesimista. “Lo peor aún no llega en términos de confianza del consumidor, ya que el impacto de la pandemia en las cifras solo se vio reflejado recién hacia la segunda quincena de marzo. Lo esperable es que durante abril los números sean aún peores”, explica Max Purcell, gerente general de GfK Adimark.

Al analizar por segmentos se observa una caída bastante generalizada, siendo solamente el grupo etario entre 18 y 35 años el que muestra un desempeño levemente más alto con 31 puntos.

De los cinco sub indicadores que componen el IPEC, los que muestran el peor comportamiento son: “estabilidad del país próximos 5 años”, con 23,1 y “situación compra artículos del hogar”, con 24,7 puntos. Dos indicadores se encuentran en su mínimo histórico desde que se inició la medición mensual en el año 2002: “situación país actual”, con 27, 2 puntos y “situación económica del país a 12 meses” con 32 puntos.

Con respecto a los otros indicadores evaluados por GfK Adimark, todos muestran caídas importantes excepto “situación económica de las empresas”, que pasa de 30,9 a 34,1 puntos.

Dos indicadores llegan a sus mínimos históricos en los últimos 18 años: “expectativa de empleo”, con 15 puntos y “situación económica familiar” con 44,2 puntos.

El porcentaje que cree que estamos en un buen momento para “comprar artículos para el hogar” alcanza 10,7%, manteniéndose en los mismos bajos niveles a los que llegó desde el estallido social de octubre de 2019. Lo mismo ocurre con “compra de vivienda”, con 9,2% y “compra de auto” con 7,5%. “Lo que estamos viendo, es que los chilenos cambiaremos nuestros hábitos de consumo de forma dramática en los próximos meses y muchos de esos cambios quedarán para siempre”, agrega Max Purcell.

Por otro lado, un 55% de los chilenos cree que los precios de las cosas subirán en los próximos 12 meses y el 42% cree que es un buen momento para ahorrar, una cifra alta que probablemente responde a la necesidad que sienten los chilenos de prepararse para meses que se vislumbran bastante negativos. “Estamos ante una situación muy crítica en términos del efecto que puedan tener las políticas públicas sobre la economía y que, si se sobre reacciona, habremos perdido años de avance donde los más afectados nuevamente será la clase media y baja, es decir, la mayoría de los chilenos”, concluye el gerente general de GfK.