De 45 a 40 horas de trabajo semanal, es lo que busca establecer el proyecto de ley puesto en tabla por el presidente de la Comisión de Trabajo y Seguridad Social, Raúl Soto, quien destacó la iniciativa y la describió como un “avance necesario para que las trabajadoras y trabajadores puedan compatibilizar su vida profesional y personal de la mejor forma”.

Cabe señalar que el proyecto ingresó en marzo de 2017 a la Cámara de diputados y su autora, la diputada Camila Vallejos (PC), además de la diputada Karol Cariola (PC), diputados Hugo Gutierrez (PC), Daniel Nuñez (PC) y los ex parlamentarios Sergio Aguiló y Lautaro Carmona, han sido enfáticos en señalar que: “una hora diaria menos de trabajo “no se traduce en productividad”.

Al respecto, el diputado Soto afirmó que la iniciativa es parte de “una serie de cambios necesarios en la legislación chilena, ya que creo que es muy importante respetar los tiempos de descanso de las trabajadoras y trabajadores como lo propuse en el proyecto de desconexión digital y en este caso, disminuir la jornada laboral, va en línea directa con regular la cantidad de horas, a veces excesivas que tienen los chilenos, lo que les hace imposible compatibilizar su vida personal y familiar con su trabajo”.

Asimismo, explicó que la iniciativa, además pretende incluir el tiempo de colación como parte de la jornada laboral, lo que a su juicio, es una forma de “velar por la salud física y mental de los trabajadores”, ya que “si estos, trabajan menos pero con mayor intensidad, la productividad sigue intacta, lo que aquí se necesita es dejar de pensar en el bienestar de la empresa o del lugar donde se ejerza el trabajo, debemos reconocer a las trabajadoras y trabajadores como la preocupación principal, para que ellos mejoren su calidad de vida, muchas veces olvidada por las largas jornadas laborales”.