La crisis en Venezuela parece no tener fin. Además de los constantes enfrentamientos entre manifestantes y militares en la frontera con Colombia, el sábado pasado, se registró la quema de dos camiones con la ayuda humanitaria que iba a ser entregada el día 23 de febrero.

Jorge Rodríguez, Ministro de Información venezolano, dijo que «hay indicios de que en esos camiones no había nada, porque ya estaban predestinados para ser quemados (..), los que están sobre esos camiones son los mismos que después los quemaron». 

Sin embargo, la oposición aseguró que los vehículos fueron quemados por integrante de la Policía Nacional Bolivariana (PNB), mientras iban a atravesar el puente Francisco de Paula Santander, que une a ambos países. El ministro Rodríguez, contrargumentó que los camiones nunca llegaron a Venezuela.

Michelle Bachelet

Por su parte, la esperada voz de Bachelet, se hizo escuchar, manifestándose contraria al uso de la extrema violencia, según diversos medios, debido al impacto que las manifestaciones en las fronteras, principalmente con Colombia, han tenido, incluso, víctimas fatales.

De esta manera, Bachelet declaró que «estas son escenas deplorables. El Gobierno venezolano debe obligar a los cuerpos de seguridad a dejar de emplear el uso excesivo de la fuerza contra manifestantes desarmados y ciudadanos comunes». 

La representante de la ONU, expresó también que existen grupos paramilitares pro-gubernamentales que, según los informes recibidos, causan hechos violentos en ambos puntos fronterizos, con Brasil y Colombia, e instó a Maduro a desarmarlos y arrestar a sus integrantes.

La ex presidenta chilena enfatizó que «es muy alarmante verlas operar de manera tan clara en Venezuela. El Gobierno puede y debe frenar que estos grupos sigan exacerbando una situación de por sí altamente inflamable».

Junto con agradecer el apoyo de Bachelet, Juan Guaidó hizo un llamado a la ONU a «tomar decisiones», debido a que, según lo publicado en su cuenta de Twitter, hay más de 300.000 venezolanos que se encuentran en «riesgo de muerte»por la crisis que se vive en las fronteras.