El 19 de diciembre, el exgeneral director de Carabineros, Bruno Villalobos, presentó un recurso de amparo contra el ministro en visita Mario Carroza, quien lo procesó como cómplice de tormentos con resultado de muerte en la investigación por el fallecimiento del estudiante universitario Patricio Manzano, en 1985. El exjefe policial acusó al magistrado ante la Corte de Apelaciones de Santiago de encausarlo sin antecedentes, por lo que la respuesta ante el emplazamiento no tardó en llegar.

Carroza, quien investiga causas de derechos humanos, respondió al amparo a través de un informe, que el 21 de diciembre hizo llegar a la corte. En el documento, el juez sostuvo que “hemos de enfatizar las razones elementales, que el suscrito tuvo para dictar este auto de procesamiento, como el contenido contradictorio de las propias declaraciones judiciales rendidas por el amparado”.

Los elementos contradictorios que cita Carroza son los relacionados al lugar donde estuvo Villalobos en la Comisaría de Los Andes, recinto en que ocurrieron los apremios que terminarían con la vida de Manzano.

Según fuentes del caso, en su primera declaración Villalobos dijo que él no había estado en el establecimiento y que no se bajó del bus de Carabineros que trasladó a los detenidos. Sin embargo, en su segundo testimonio, ahora en calidad de inculpado, dijo que sí estuvo en el lugar.

Carroza, en el informe enviado a la corte, sostuvo que “el proceso actualmente se encuentra en estado de sumario y producto de las diligencias efectuadas han surgido nuevos y mejores antecedentes que han llevado a quien suscribe a considerar que existen presunciones fundadas para estimar que al amparado le cabe participación en el delito”.

Consultado el abogado de Villalobos, Ángel Valencia, señaló que “no existen contradicciones en las declaraciones que prestó. Hay un relato coherente en todas las partes de sus testimonios, tanto en la versión que entregó como testigo, como en la que entregó como inculpado”. Además, insistió en la inocencia de su representado.

Valencia decidió desistirse del amparo presentado contra Carroza, según explican, por razones netamente técnicas. Como el recurso fue interpuesto cuando el general (R) estaba en prisión, y posteriormente quedó en libertad bajo fianza, estimaron conveniente revocar el procesamiento mediante un recurso de apelación.

En el procesamiento, Carroza estableció que Manzano era parte de un grupo de estudiantes de la Universidad de Chile que viajó a Los Andes para trabajar en labores de reconstrucción, por el terremoto que ocurrió en la zona central en 1985. El grupo fue detenido por Carabineros y Villalobos fue parte del contingente que trasladó a los estudiantes hasta la unidad policial de la zona.