El juez federal de Brasil, Sergio Moro, responsable de las investigaciones del caso Lava Jato, aceptó esta jornada ser ministro de Justicia del Gobierno del presidente electo de Brasil, Jair Bolsonaro.

A la salida de la reunión que mantuvo con el vencedor de la segunda vuelta de la elección presidencial brasileña, realizada en la casa del futuro Mandatario, el juez Moro afirmó que la posibilidad de establecer una agenda anticorrupción y contra el crimen organizado lo llevó a aceptar el cargo.

En una entrevista previa, Bolsonaro señaló que pensaba en Moro como su ministro de Justicia o como uno de los 11 magistrados que integrarán el Tribunal Supremo, aunque la primera vacante en la máxima corte del país tan sólo se abriría el año 2020.

El magistrado, símbolo de la lucha anticorrupción para una parte de la población brasileña, manifestó sentirse «honrado» con la invitación realizada por Bolsonaro, vencedor de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales del pasado domingo.