Con el objetivo de presentar nuevos antecedentes en el caso del asesinato del profesor Nibaldo Villegas, esta jornada se llevó a cabo la reformalización de los únicos acusados de este hecho, su ex esposa Johanna Hernández (32) y su actual pareja, Francisco Silva (37).

Según dio a conocer la Fiscalía en el Juzgado de Garantía de Villa Alemana, el crimen fue preparado con días de antelación, donde -según dijo el fiscal José Miguel Subiabre- los acusados compraron clonazepam para drogar al docente, dormirlo y cometer el crimen.

El persecutor relató que «las cantidades (de clonazepam) utilizadas fueron disueltas en un licor y permitieron establecer un estado de inconsciencia como si estuviera en estado de coma».

De igual forma, explicó que «no tenía respuesta de ningún tipo desde el sistema nervioso, no se daba cuenta de lo que estaba aconteciendo, no tenía control, estaba en un estado de indefensión absoluta».

Con esta situación, Fiscalía señaló que se acredita la premeditación del crimen cuando, tras drogar al profesor Villegas, Johanna Hernández da aviso a Francisco Silva para que entre al domicilio, lugar donde lo apuñalaron en reiteradas ocasiones, para finalmente descuartizarlo en su propia cama.

Otro hecho informado en esta reformalización dice relación con el traslado de Francisco Silva a la Unidad de Salud Mental Adulto del Servicio Médico Legal (SML), situación que se llevará a cabo el 16 de octubre, con el objetivo de realizar pericias psiquiátricas respecto a su presunta inimputabilidad. La mujer, en tanto, será llevada al mismo lugar 24 horas después.