Luego que el fiscal nacional, Jorge Abbott, designara a la persecutora adjunta de Talcahuano, Ana María Aldana, para investigar presuntos delitos por la contaminación que afecta a Quintero y Puchuncavi, hoy finalmente se sumó al equipo que lidera el fiscal jefe de Quintero, Mauricio Dunner.

La abogada se integró al equipo de la región de Valparaíso y permanecerá en él, en principio, durante las próximas tres semanas, con el objetivo de dilucidar si hubo -o no- delitos por parte de las empresas presentes en el cordón industrial de ambas comunas.

La primera actividad que realizó la presecutora en la zona fue reunirse junto a todo el personal de la Fiscalía, además del equipo de la Brigada de Delitos Medioambientales (Bridema) de la PDI, con quienes analizó la información y estableció algunas acciones a desarrollar en las próximas horas.

Aldana es pionera a nivel nacional en investigaciones penales relacionadas con el área medioambiental, al obtener una condena por infracción a la ley de Seguridad Nuclear que provocó graves lesiones y secuelas a un trabajador en diciembre de 2005, en el sector Nueva Aldea, comuna de Ranquil, en la actual región de Ñuble.

En mayo de 2007 investigó la contaminación producida por el derrame de 600 metros cúbicos de petróleo de ENAP en la bahía de San Vicente, en Talcahuano, consiguiendo una salida alternativa que permitió la construcción de un muelle para carga y descarga de hidrocarburos en la zona afectada.

Desde 2013, la fiscal Aldana dirige la investigación por la propagación indebida de elementos contaminantes del complejo termoeléctrico Bocamina, de Endesa, en Coronel. La causa se encuentra vigente y ya formalizó al gerente de la planta, el administrador y el encargado de medio ambiente.