Tras seis meses de trabajo y más de 100 encuentros, el presidente Sebastián Piñera anunció el Acuerdo Nacional por el Desarrollo y la Paz en La Araucanía, plan que busca dialogar y buscar soluciones para mejorar la calidad de vida de las familias de esta región.

El acuerdo está fundado en tres principios esenciales: voluntad de diálogo, colaboración, la búsqueda de acuerdos y la paz; el segundo, es el reconocimiento, la valoración, el aprecio, el apoyo y el compromiso de preservar la cultura, las tradiciones, la lengua, las costumbres, la educación, la salud y la cosmovisión de nuestros pueblos originarios; y el tercero es hacerlo de manera oportuna, sin perder más tiempo.

Dentro de las medidas, está constituir un Consejo por el Reencuentro de La Araucanía, integrado por representantes de distintos sectores y que estará encargado de continuar un amplio proceso de diálogo en la región, así como hacer seguimiento de los grados de avance en la implementación del plan.

Contempla también una ayuda y colaboración con las víctimas de la violencia y el terrorismo que han afectado a la zona; recuperación de actividades productivas, permitir un reemprendimiento de personas que lo perdieron todo; ayudar a recuperar bienes y activos; y también, mejorar la infraestructura que ha sido destruida por actos violentos y de terrorismo que han afectado a La Araucanía.

Además, se presentará una reforma constitucional que incorpora en la Constitución el reconocimiento y la valoración de los pueblos originarios que habitan nuestro territorio, y se pondrá urgencia a los proyectos de ley que crean el Ministerio y Consejo de los Pueblos Originarios.

De igual forma, se avanzará en una ley de cuotas mínimas para promover la participación de candidatos de pueblos originarios, se trabajará en herramientas que potencien las iniciativas productivas y se permitirá a comunidades titulares de tierras que puedan dividir -total o parcialmente- el título común.

Este Acuerdo Nacional va acompañado del Plan Impulso Araucanía, que considera 491 proyectos de inversión en ocho años, equivalente a un aporte de cercano a los US$ 8 mil millones entre 2018 y 2026.