La Superintendencia del Medio Ambiente (SMA) formuló cargos contra la empresa Gasmar S.A., la cual es dueña y operadora de una planta de almacenamiento de gas licuado de petróleo en la zona de Quintero y Puchuncaví, la cual ha sido víctima de diversos hechos de contaminación ambiental.

La SMA ha determinado formular cargos por deficiencias en el funcionamiento del sistema de antorcha, en relación a un flujo de gas barrido y de gas piloto, inferiores a lo comprometido en la RCA que regula esta actividad. Dicho cargo se califica como «grave», por incumplimiento de una medida establecida en su autorización ambiental destinada a eliminar o minimizar los efectos adversos del proyecto.

El organismo hizo presente que los antecedentes reunidos, analizados y procesados de acuerdo a los mismos criterios y metodologías empleadas en el caso anterior, «configuran claros incumplimientos, no entregan elementos suficientes, por ahora, como para imputar responsabilidad en los episodios de contaminación que afectaron a los vecinos de la zona durante la semana del 20 de agosto pasado».

Además del cargo señalado, se formularon otros cargos por otros incumplimientos, como «la falta de acreditación del mantenimiento de la antorcha y equipos conexos; el incumplimiento de la obligación de adecuado manejo de residuos peligrosos y la falta de respuesta íntegra a un requerimiento de información formulado por la Superintendencia en 2017».

Una vez notificada la formulación de cargos, la empresa tendrá un plazo legal para presentar un Programa de Cumplimiento (10 días hábiles), o Descargos (15 días hábiles), conforme al procedimiento que está previsto en la Ley Orgánica de la SMA.