A través de un correo electrónico dirigido al presidente Sebastián Piñera, el vicepresidente del directorio de la Empresa Nacional del Petróleo (ENAP), Gonzalo de la Carrera, renunció a su cargo en la compañía.

Su salida de la estatal se produce en medio de los tres episodios de contaminación que han afectado a la zona de Quintero y Puchuncaví, situación que ha dejado a más de 300 personas intoxicadas, razón por la que la Superintendencia del Medio Ambiente formuló cargos contra le empresa.

Al respecto, De la Carrera planteó a radio Duna que «me siento que estoy en un dilema ético difícil de solucionar. Creemos que, si bien, ENAP puede participar de la contaminación de alguna forma, no es la causante de la nube tóxica».

Además, reiteró que «esto tiene que ver con un dilema ético al que me vería enfrentado si aceptara un informe que es absolutamente contradictorio con los informes técnico que nosotros tenemos».

Continuó señalando que «la hipótesis inicial que había de la nube tóxica, que no es hipótesis nuestra sino que de las autoridades del Medio Ambiente, era que ésta era nitrobenceno y metilcloroformo».

En ese sentido dijo que «esos gases nunca han sido manipulados ni emitidos al medio ambiente por ENAP, pero resulta que la resolución que sale ayer ya no habla de esos gases y tampoco se refiere cómo los hidrocarburos eventualmente que ENAP emite llegan a formar una nube tóxica. Los informes técnicos dicen que eso es prácticamente imposible de que ocurra».

Por ello, cerró diciendo que «no teniendo la posibilidad de defender a ENAP o no teniendo la independencia para hacerlo, no me quiero quedar en la situación de quedar atrapado con una resolución con la cual discrepamos y tenemos muy pocas posibilidades de poder defendernos».