La Federación de Sindicatos de ENAP manifestó su rechazo a la determinación tomada por la Superintendencia del Medio Ambiente (SMA), que formuló cargos por el episodio de contaminación registrado el pasado 21 de agosto en las comunas de Quintero y Puchuncaví.

A través de su presidente, Norberto Díaz, y acompañado por unos 40 trabajadores, la Federación de Sindicatos manifestó que «no tenemos ninguna responsabilidad», agregando que «nos han utilizado como chivo expiatorio”. A partir de ello, adelantó que podrían llevar a cabo un paro nacional.

Díaz señaló que «nos declaramos en estado de alerta por los alcances que puede tener también para la región de Magallanes el acuerdo bilateral que firmó el Gobierno, que permitiría traer gas desde Argentina. En más de una oportunidad, y por las más diversas razones, los acuerdos de compra de gas han derivado en dificultades para el país y la población por la falta de continuidad del suministro».

Además, la Federación apunto al presidente Sebastián Piñera, recordando el conflicto entre el Gobierno y ENAP registrado en 2011: «Lo mismo hace hoy con nosotros. Por eso, todos los sindicatos se declaran en estado de alerta y dispuestos a defender a la empresa de aquellos que pretenden afectar la viabilidad del rol estratégico de esta empresa pública, de aquellos que la acusan en forma infundada, de aquellos que tienen oscuras intenciones de privatizarla, y de quienes han jugado con la salud de Quintero”.

En cuanto a los episodios de contaminación que han afectado a la zona de Quintero y Puchuncaví, el dirigente sindical señaló que «nos usan como cortina de humo para no decir cuáles son los verdaderos responsables de la nube tóxica”.