Equipos de funcionarios de la Aduana de San Antonio lograron cuatro importantes hallazgos en materia de seguridad, impidiendo el ingreso al país de un arma de fuego calibre 9 mm, 5.500 aparatos de electroshock y 90 mil velas pirotécnicas, procedentes de China.

En el primer caso, los fiscalizadores detectaron el arma de fuego marca ME Ranger calibre 9 mm oculta y una caja con 30 municiones en un contenedor que declaraba poseer colchones y maquinaria. Por instrucciones de la Fiscalía, los funcionarios entregaron el arma y las municiones en cadena de custodia a Carabineros, donde se realizarán los peritajes correspondientes.

Otro caso relevante fue el de dos contenedores que ingresaban al país declarando, entre otras mercancías, 50 cajas con un total de 5.000 unidades de linternas a pila, en un caso, y en el otro, seis cajas con 500 unidades de linternas similares. Sin embargo, la revisión física por parte de los funcionarios de la Aduana de San Antonio estableció que los aparatos tenían características especiales.

El análisis detallado permitió determinar que se trataba de linternas con electroshock, de acuerdo a investigaciones de productos de similares características realizadas por el Instituto de Investigaciones y Control del Ejército de Chile. Según esto, fueron catalogadas como armas o elementos de protección personal y por tanto reguladas y controladas por la Dirección General de Movilización Nacional (DGMN), que establece un reglamento para la importación y comercialización de estos elementos.

Por lo anterior, ambas cargas se tipificaron como mercancías prohibidas, lo que constituye el delito de contrabando.

Finalmente, un cuarto hallazgo se realizó al fiscalizar una carga que ingresaba al puerto declarando contener 50 paquetes con 15 mil sets de velas de diferentes diseños. La revisión física constató que se trataba de 90 mil velas pirotécnicas, mercancía que tiene prohibido el ingreso al país porque infringe la Ordenanza de Aduanas y la Ley 17.798 de control de armas y explosivos.

En estas materias el Servicio Nacional de Aduanas cuenta con un Plan Integrado de Fiscalización (PIF) de Seguridad, que permite el trabajo coordinado en materia de análisis de perfiles de riesgo y de intercambios de información con otros organismos, como las policías, el Ministerio Público y el Ministerio del Interior, entre otros, para reforzar las acciones conjuntas e impedir el ingreso al país de armas, municiones y artículos que pongan en riesgo a la ciudanía.

Estos cuatro decomisos se suman a los hallazgos realizados en materia de Seguridad por la Aduana de San Antonio durante el primer semestre de este año, meses en los que, en total, se incautaron 444 armas blancas, cuatro armas de fuego y 33.052 municiones. A nivel nacional, durante el primer semestre se decomisaron 42.348 artículos en un total de 66 procedimientos realizados.