Mario Abdo Benítez asumió hoy como Presidente de Paraguay en un acto al que asistieron siete jefes de Estado y más de cien delegaciones extranjeras, sin embargo, el acto no contó con la presencia del mandatario saliente, Horacio Cartes, quien se encuentra totalmente distanciado del nuevo jefe de Gobierno que pertenece a otra línea del mismo Partido Colorado.

Esta situación fue analizada por el líder opositor, Miguel Abdón Saguier, del partido Liberal, quien explicó que «su partido se encuentra profundamente dividido y la oposición lo podrá acompañar si sus proyectos son genuinos, democráticos y si demuestra que su Gobierno es aperturista».

Abdo prestó juramento ante el presidente del Congreso, Silvio Ovelar, a quien Cartes le traspasó el mando horas antes, en un acto al aire libre en los patios del Palacio, asentado frente a la bahía que forma el río Paraguay en Asunción.

El actual Mandatario tuvo una activa participación en las marchas del año pasado, cuando opositores incendiaron una parte del edificio del Congreso, airados por una maniobra de senadores «cartistas» en complicidad con un sector minoritario de la oposición, con el objetivo de impulsar una reforma de la Constitución y permitir la reelección de Cartes.