Una intervención integral, que implica el retiro de adoquines, compactación de terreno, pavimentación y reinstalación de las piedras, está desarrollando la Municipalidad de Viña del Mar en la calzada poniente calle San Antonio con 11 Norte, la que presentaba cierto deterioro.

Las obras implican una inversión municipal del orden de los $3 millones y son ejecutadas por el Departamento de Construcción e Infraestructura Urbana, y estarán listas en los próximos días para reestablecer el tránsito normal.

La alcaldesa Virginia Reginato explicó que «esta calle tiene un intenso flujo vehicular y presentaba problemas que debían solucionarse con urgencia, especialmente para asegurar un tránsito seguro para los automovilistas y la locomoción colectiva, por lo que iniciamos su reparación para brindar tranquilidad a los usuarios».