Es común ver en las calles de Valparaíso innumerables expresiones artísticas que conviven en el diario vivir. Músicos, titiriteros, artistas del teatro, del circo, organilleros, estatuas vivientes y artesanos, dan vida a las principales avenidas y equinas de la ciudad. Muchos de estos artistas realizan sus trabajos por remuneraciones voluntarias y utilizan el espacio público como escenario para ejecutar sus presentaciones. Sin embargo, en algunas ocasiones, al no contar con un permiso ni un lugar fijo para desarrollar sus oficios, son vulnerables ante fiscalizaciones de Carabineros u otras instituciones.

Es por esto que la Dirección de Cultura del municipio de Valparaíso, tras una petición que surge en los Congresos Culturales Ciudadanos, ha comenzado a trabajar junto a la comunidad artística, en la construcción de la primera ordenanza municipal que regule el trabajo de artistas urbanos en las calles, definiendo entre otras cosas, zonas para su desarrollo con condiciones adecuadas y además, horarios en los cuales ejecutar sus actividades artísticas en la calles del puerto.

Isabella Monsó, encargada de Cultura del municipio, comentó que “nuestro interés con generar esto en ningún caso es restringir el uso del espacio, al contrario, queremos promover y fortalecer al artista callejero, determinado zonas para el desarrollo de sus actividades, y que de esta forma, ellos no tengan problemas con Carabineros ni con otras instituciones por el uso legítimo del espacio público».

Para Melissa Johnson, dirigenta del Sindicato de Músicos de la Vía Pública y el Transporte de Valparaíso (Simuval), «es importante que haya una ordenanza que resguarde y que nos ayude a fomentar esta labor, sobre todo acá, que es una capital cultural de este país, una verdadera zona franca cultural”.

Parte de los objetivos centrales de la construcción de esta ordenanza es entregar una orientación a los artistas callejeros, sobre cómo y dónde ejecutar su labor, además de protección y fomento de sus diversas expresiones. De esta forma, se pretende contribuir al ordenamiento de la ciudad, pues algunos vecinos han manifestado su incomodidad con determinadas expresiones artísticas callejeras.

Se espera que durante las próximas semanas se realice una segunda convocatoria a los representantes que se escogieron en cada una de las mesas de trabajo, con el objetivo de construir la ordenanza, la cual será presentada en una jornada a toda la comunidad y posteriormente al Concejo Municipal.