Negro fue el fin de semana para tres de los cinco clubes de la región de Valparaíso, tanto en Primera A como en Primera B, el que incluso terminó con dos de sus directores técnicos desvinculados.

Todo comenzó el sábado, cuando San Luis de Quillota perdió 0-3 ante Universidad de Concepción en el estadio Lucio Fariña, lo que derivó en el término del contrato de Miguel Ramírez.

Al respecto, el entonces DT de los canarios explicó al finalizar el encuentro que «hemos llegado un acuerdo con los dirigentes y nuestro ciclo llega hasta acá».

La mala racha de los equipos de la zona continuó el domingo en Viña del Mar, donde en el estadio Sausalito Everton sólo consiguió un empate 2-2 ante Deportes Temuco, lo que también generó la salida de su adiestrador, Pablo Sánchez.

Pese a que «Vitamina» aún tenía seis meses de contratos, desde la dirigencia oro y cielo explicaron que llegaron a un acuerdo para adelantar su salida.

Cabe indicar que de los 67 partidos que dirigió a Everton, Sánchez logró 23 victorias, 20 empates y 24 derrotas. En este periodo se registraron 87 goles a favor y 91 en contra.

También durante la tarde de este domingo 27, pero en El Salvador, Santiago Wanderers volvió a caer en el campeonato de Primera B, esta vez ante Cobresal por 1-0.

El problema radica en que esta nueva derrota de los caturros los sepulta aún más en la tabla de posiciones, quedando en el último lugar a tres puntos de San Marcos de Arica.

El único club que sacó la cara por la región fue Unión San Felipe, que derrotó 1-3 a Deportes Puerto Montt en el sur. Además, esta noche Unión La Calera espera emular lo hecho por los sanfelipeños, cuando a las 20:00 horas enfrenten a Colo-Colo en el estadio Monumental.