Las declaraciones cruzadas entre el fiscal nacional, Jorge Abbott, y el ex fiscal Carlos Gajardo, continúan llevándose a cabo a través de los medios de comunicación.

Cabe recordar que todo comenzó durante la cuenta pública del Ministerio Público, donde el jefe del organismo criticó «ciertas posturas de algunos persecutores», situación que fue tomada como una indirecta por Gajardo, quien aseguró que opinar sobre eso era una «pérdida de tiempo».

A raíz de esto, el fiscal nacional indicó a T13 Radio que “desgraciadamente, el personaje terminó comiéndose al buen fiscal, absorbiendo a los grandes fiscales que son”.

Continuó sus palabras diciendo que «el problema de los fiscales Gajardo y (Pablo) Norambuena es que no lograron entender que el Ministerio Público es una institución jerarquizada, y que quienes toman las decisiones son los fiscales regionales, que son los que tienen la titularidad de la acción penal».

En consecuencia, sostuvo que «ellos debiesen haberse subordinado a lo que su jefe resolvía sobre el particular”.

Además, señaló que la salida de ambos persecutores “efectivamente nos hace daño, por cierto, hay una afectación a la institución, pues ambos eran buenos fiscales y es lamentable que se hayan ido de la institución, eran un aporte”.

Finalmente, Abbott dijo que «estos protagonismos, lo que llevan es a afirmaciones categóricas que hacen muy atractivo que los fiscales tengan acceso a los medios de comunicación y las redes sociales. Salir a dar entrevistas a los medios no es prudente para la función que realizan los fiscales, es perjudicial porque generan expectativas importantes en la población que luego no son satisfechas».