Por votación unánime, el Concejo Municipal de Recoleta aprobó la nueva ordenanza municipal que previene, prohíbe y sanciona el acoso callejero. Medida que busca proteger la integridad de las personas frente a comportamientos que constituyan acoso sexual en el espacio público y contribuir a erradicar las prácticas de acoso que experimentan mujeres, hombres y niños en la comuna.

Se considerará como una infracción grave a la Ordenanza si, de manera individual o grupal, se cometa cualquiera de estas infracciones contra menores de edad, adultos mayores, personas en situación de discapacidad, personas con movilidad reducida o personas con intoxicación temporal.

En concreto, lo que la ordenanza persigue son gestos obscenos como silbidos, jadeos, o bocinazos, así como también comentarios o expresiones humillantes, hostiles u ofensivas en el plano sexual, por lo que las multas comienzan desde los $47.396 y podrían alcanzar los $236.980.

Al respecto, el alcalde Daniel Jadue señaló que buscan «evitar no sólo la violencia contra la mujer, sino también contra minorías sexuales y niños estudiantes. Estamos liberando el espacio público de Recoleta de cualquier tipo de acoso sexual y estos van a estar de aquí en adelante sancionados con multas que son bastante importantes”.

De acuerdo con los estudios realizados por el Observatorio Contra el Acoso Callejero, tres de cada cuatro personas han sufrido acoso sexual callejero, es decir, un 75% de la población. En el caso de las mujeres, la cifra llega al 85% y de los hombres, al 55%. Mientras que el 70% de los casos de acoso callejero ocurren durante la niñez o adolescencia de la víctima.