Suiza clasificó por undécima vez a una Copa del Mundo, cuarta de forma consecutiva; esto, luego de empatar sin goles ante Irlanda del Norte en el primero de los cuatro duelos de vuelta de la repesca europea al Mundial de Rusia 2018.

El partido, disputado en el estadio St. Jakob-Park, estuvo marcado por la intensa lluvia caída a lo largo de toda la jornada en Basilea, que otorgó al encuentro una emoción de inicio a fin.

En los primeros compases, la selección helvética volcó sus ataques por el costado derecho, donde Stephan Lichtsteiner y Xherdan Shaqiri llegaban con profundidad y ponían balones de gol que no encontraban remate. Irlanda del Norte, por su parte, se sacudía la presión poco a poco con una eficiente presión en el centro del campo y avisaba a los locales con dos buenos disparos de Chris Brunt bien abortados por el guardameta Yann Sommer.

En el segundo tiempo, Suiza erró varias ocasiones claras que mantuvieron en la eliminatoria a los Green and White Army. Y a punto estuvieron de empatar por medio de Conor Washington y George Saville, pero el cabezazo del primero y el flojo disparo del segundo no movieron el marcador.

En una de las últimas jugadas del partido, Jonny Evans aprovechó una mala salida de Sommer para rematar de cabeza, y solo un pie milagroso del chileno nacionalizado suizo, Ricardo Rodríguez, autor además del solitario gol que decide la eliminatoria por un global de 1-0, salvó a los suizos de, al menos, la prórroga.