A través de una emotiva e íntima ceremonia, en compañía de sus más cercanos colaboradores, el voluntariado más antiguo del Hospital de Quilpué, las Damas Rojas, celebró 50 años de existencia, en los cuales ha desarrollado una importante y desinteresada labor en beneficio de los pacientes y sus familiares.

Luego de una liturgia de aniversario, celebrada en el club social “Magallánico” de Quilpué, presidida por el diácono de la parroquia Nuestra Señora del Rosario, Miguel Ormeño, la presidenta de este histórico voluntariado, Ximena Cerda, repasó los hitos más importantes de la historia de la organización, que nacieron sólo tres años después de la inauguración del centro asistencial.

Al respecto, Cerda dijo que «hace 50 años, un grupo de señoras estimó crear, con mucha generosidad y amor, un voluntariado para este joven hospital. Nuestro quehacer consistiría en entregar lo mejor de nuestro cariño y voluntad a los que, por alegres o tristes razones, se encontraban allí”.

La presidenta agregó que “tenemos una trayectoria de ayuda que nos llena de orgullo por nuestra entrega de amor desinteresada hacia los pacientes y sus familiares. Se destaca el amor incondicional de las Damas Rojas, de las personas que la integran».

Reconocimientos

Durante la ceremonia, recibieron un reconocimiento por 30 años de servicio en este voluntariado, Helia Berríos y Ana Crawford; mientras que la Agrupación entregó reconocimientos a algunos de sus colaboradores: Alejandro Sgonobisch, Francisco Peña, Leonardo Castillo, Eduardo Rojas y al Club Magallánico.

Por su parte, el Hospital de Quilpué, a través de la Subdirección Gestión del Usuario y Participación, también reconoció a través de un presente, la importante labor que han desarrollado durante cincuenta años de servicio.