La Iglesia Evangélica anunció el quiebre de las relaciones con el Gobierno, atribuyendo esta decisión a los «ataques violentos sufridos en redes sociales y la prensa»; esto, por los insultos y fuertes críticas hacia la presidenta Michelle Bachelet y su Gobierno durante el Te Deum realizado en Santiago el pasado domingo.

Cristián Nieto, director de comunicaciones de la Iglesia Evangélica aseguró que la ceremonia religiosa realizada el pasado domingo «no fue una operación política como dijeron en el Gobierno», por lo que indicó que se iniciaba un «enfriamiento» con el Ejecutivo.

En lo concreto, Nieto pidió que «se hable con la verdad» y expresó «nuestra desazón por los comentarios que se hacen en la prensa, comentarios mal intencionados donde nos quieren hacer ver como intolerantes, agresivos, talibanes y no lo somos”.

Además, sostuvo que «se ha faltado a la verdad, porque en este templo no se insultó a la Presidenta, de parte de los líderes que estaban”. Agregó que «muéstrenme algún video, algún medio de comunicación donde se vea que nosotros agredimos a la Presidenta como se dijo».

Por último, Nieto expuso que «no podemos hacernos cargo de los estados emocionales de las personas, por lo menos de los que estaban afuera”.