Irma fue catalogado previamente por las autoridades climatológicas de Estados Unidos como “el huracán más devastador jamás registrado”. Y lamentablemente así parece ser.

El fenómeno arrasó con una serie de islas del Caribe como Antigua y Barbuda, San Martín y San Bartolomé, las que sufrieron los embates de los fuertes vientos y gran cantidad de agua.

Viviendas completamente destruidas, infraestructura (pública y privada) con serios daños e incomunicación fueron sólo algunos de los estragos que dejó el paso de Irma por estas tres pequeñas localidades caribeñas.

Según autoridades estadounidenses, Irma tiene categoría 5 (la máxima), con una longitud de 200 kilómetros y vientos que bordean los 300 kilómetros por hora.

Pese a la gran devastación que ha dejado, aún no pasa lo peor, ya que esperan que en las próximas horas Irma llegue hasta la ciudad norteamericana de Miami, en el estado de Florida.

Junto a ello, se espera que este jueves el huracán se aproxime hasta la isla de República Dominicana y Haití, mientras que para el viernes se pronostica su llegada a Cuba.