Detectives de la Brigada de Investigación Criminal (Bicrim) de la PDI y del Departamento de Extranjería realizaron una fiscalización a moradores de un inmueble ubicado en la avenida Carlos Condell, en la comuna de Quillota.

Los oficiales, tras haber realizado un trabajo de análisis, se constituyeron en un domicilio donde se manejaban antecedentes de la presencia de gran cantidad de ciudadanos de diversas nacionalidades, siendo ubicados en el lugar un total de 56 personas, de los cuales 48 eran haitianos, cuatro venezolanos y cuatro chilenos.

En este procedimiento, la policía civil detectó que 10 personas, originarias de Haití, se encontraban en situación irregular, en su mayoría porque sus visas de turismo habían caducado, por lo que conforme a la Ley de Extranjería fueron denunciados a la autoridad administrativa.

Por otra parte, se detuvo a una mujer chilena, de 23 años, quien registraba una orden de detención vigente por el delito de hurto simple, siendo puesta a disposición del Juzgado de Garantía.