Ha pasado un año y nuevamente la decisión de cambiar el huso horario para enfrentar la temporada invernal trae a la discusión la pregunta «¿qué es lo mejor para los habitantes del territorio chileno continental?».

Las autoridades señalan que las razones que justifican la medida dicen relación con variables como el ahorro energético y la seguridad, entre otras. Sin embargo desde la comunidad científica difieren, argumentando que los cambios de huso horario que generan déficit de sueño impactarían negativamente en el desempeño y la salud de las personas.

Así lo asegura John Ewer, investigador del Centro Interdisciplinario de Neurociencia de la Universidad de Valparaíso, reconocido científico quien tiene una profunda investigación sobre los relojes biológicos en los seres vivos.

Respecto a la medida que aplicará a todo el país, salvo en la región de Magallanes, Ewer explicó que «si el sol se levanta más tarde, uno naturalmente se despierta más tarde. Ahora, si tienes la obligación de levantarte más temprano, se genera un déficit de sueño y eso te va a pasar la cuenta».

Agregó que «la gente de Magallanes pidió esto para tener más luz en la tarde, pero caen en un error, porque van a tener muy poca luz en la mañana».

A juicio del investigador, «los magallánicos van a estar más dormidos en la mañana, porque  el sol va a aparecer recién entre las 8:00 y las 9:00, lo que les generará un déficit de sueño de dos a tres horas, dependiendo de la hora en que se levanten».

Por último, sostuvo que «van a sufrir las consecuencias de estar un poco más dormidos en las mañanas y eso va a afectar el rendimiento, los aprendizajes y va a impactar en la salud de los habitantes”.