Luego de conocerse el presunto fraude que involucró a Carabineros y que significó dar de baja a nueve oficiales de la institución, el ministro del Interior, Mario Fernández, salió al paso de este tema, asegurando que «es una situación grave» y que aún «sus dimensiones no han sido cuantificadas completamente».

A su vez, el jefe de gabinete dio a conocer que está al tanto de esta situación desde el jueves de la semana pasada, cuando el general director de la institución, Bruno Villalobos, lo informó al respecto.

Acerca de la salida de los nueve oficiales, Fernández dijo que «respaldamos la decisión que tomó la institución, que es respetable y respetada. La Dirección del general Villalobos ha actuado de manera rápida, abierta y ajustada a derecho, por tanto el gobierno respalda plenamente el accionar del mando».

Respecto a la investigación, aseguró que «se está en medio de una investigación interna de Carabineros que está siendo llevada a cabo prolijamente, por tanto no se ha determinado el daño causado. Pero sí puedo decir que Carabineros desde que tuvo conocimiento fue allegando antecedentes a la investigación que lleva la Fiscalía de Punta Arenas».

Por último comentó que no se le ha dado ningún plazo a Carabineros porque a su juicio «lo más importante es que la investigación se lleve a cabo bien, prolija y a fondo».