El jefe de la bancada DC, diputado Fuad Chahin, respaldó hoy la decisión del Gobierno de enviar un veto parcial al Congreso por la Reforma Laboral y un proyecto de ley que apunte a complementarlo,  señalando que “lamentablemente tras la ofensiva de la oposición para frenar esta importante reforma en beneficio de los trabajadores, hemos perdido tiempo porque este proyecto ya podría ser ley, pero hay caminos para reestablecer el espíritu original, y por eso apoyamos la decisión del Gobierno en busca de una pronta promulgación de la reforma “.

Así lo señaló también el presidente de la comisión de Trabajo, diputado DC Patricio Vallespín, quien agregó que “tal como lo dijimos desde un comienzo , el veto o una reforma constitucional o un proyecto complementario eran las opciones. Lo importante es que no se pierda el sentido esencial de la iniciativa y logremos defender la titularidad sindical y avanzar hacia relaciones laborales más simétricas y justas“.

El jefe de la bancada, Fuad Chahin, precisó que “lo del Tribunal Constitucional fue sin duda un golpe al sindicalismo en Chile y lo señalamos con todas sus letras, pero confiamos en el éxito de este veto logrando reestablecer la decisión soberana del Congreso que votó a favor de fortalecer los sindicatos “, refiriéndose al artículo que brindaba exclusividad sindical en la negociación colectiva.

Vallespín agregó, además, que “Chile necesita fortalecer sus sindicatos, y aunque la derecha se oponga, sabemos que la inmensa mayoría de los chilenos y chilenas así lo piensa. Especialmente, porque tenemos una tasa de  sindicalización no superior al  14%, una de las más bajas de América Latina.”

El Fallo del TC que declaró inconstitucional la norma relativa a la titularidad sindical –pronunciándose tras un recurso interpuesto por la derecha –  fue criticado por los diputados DC, lamentando que “no se respetara una decisión democrática de la mayoría del Parlamento “.

La nueva ley busca que el sindicato sea el principal agente de negociación colectiva y prohíbe los reemplazos de trabajadores durante las huelgas, incluyendo un sistema de servicios mínimos.