En el Aula Mayor de la Facultad de Ingeniería se realizó la inauguración del Año Académico de la Escuela de Ingeniería en Construcción de la PUCV. En la ocasión, se realizó el seminario “Desarrollo Urbano de la ciudad de Valparaíso. Metrocable como elemento de movilidad y conectividad”, oportunidad donde un equipo multidisciplinario dio a conocer un proyecto de teleférico para la ciudad puerto que conectaría al centro de la ciudad con el sector de Placilla y Curauma.

La propuesta está siendo abordada de manera conjunta entre la Escuela de Ingeniería en Construcción y la Escuela de Arquitectura y Diseño de la PUCV, la Municipalidad de Valparaíso y la Municipalidad de Medellín. En esta última localidad, existe un sistema de metrocable que opera desde 2004 y tiene una extensión de 9,37 kilómetros, transportando diariamente a más de 35 mil personas.

En la oportunidad, el arquitecto y exalumno PUCV, Harken Jensen, dio a conocer algunos avances de la propuesta que conectaría a la Avenida Francia con el Tranque La Luz en Curauma, lo que favorecería el transporte en la ciudad y contribuiría a descongestionar el plan.

Al respecto, el director de la Escuela de Ingeniería en Construcción, Alvaro Peña, señaló que se ha realizado un estudio de perfil del desarrollo urbano de la ciudad de Valparaíso para disponer un teleférico como un elemento de movilidad y conectividad.

“El proyecto parte de la base de que cualquier iniciativa de desarrollo en infraestructura en el mundo debe incluir un componente de sustentabilidad, es decir, un equilibrio entre lo medioambiental, lo social y técnico académico. En segundo lugar, la ciudad se va adaptando a las crisis con una mirada de futuro. Tiene que ser un proyecto donde se piense el desarrollo de Valparaíso, asociado al sector inmobiliario, de infraestructura pública, zonas de servicios y transporte”, precisó.

El profesor Peña agregó que Valparaíso debe continuar creciendo hacia los cerros. “Se requiere incorporar las áreas que fueron afectadas por el terremoto y zonas alejadas como ocurre con Placilla, donde se disponga un método de transporte que funcione con energías limpias, que opere con biogás obtenido en un vertedero y que sea de un costo bajo de operación e innovador, sin ruido, sin contaminación y muy eficiente y veloz”.

Una vez aprobado los diversos proyectos en sus fases de diseño e ingeniería de especialidad, la construcción no debería tardar más de un año. “Si todo resulta como está planeado, podría estar operando a mediados de 2018. La inversión se asocia a la longitud de la propuesta. A través de este sistema se conecta la ciudad, se involucra la comunidad al proyecto, las estaciones incorporan nuevas zonas de servicio y generan nuevos polos de desarrollo, mejorando los barrios”, complementó Peña.

INTENDENTE VALORÓ LA PROPUESTA

El intendente regional Gabriel Aldoney asistió a la ceremonia de inauguración del Año Académico y valoró la propuesta realizada por la PUCV pues representa un gran desafío al resolver el problema de movilidad en Valparaíso, no sólo entre el cerro y el plan sino que también entre los sectores altos de la comuna.

Por su parte, el alcalde de Valparaíso, Jorge Castro, agregó que la propuesta es un paso importante para contar con una ciudad que se proyecta al futuro en el siglo XXI. “Esta iniciativa es importante pues significa mejorar el traslado de las personas, en un medio de transporte seguro, que esté conectado con el metro, los buses y los troles. Es un paso hacia el siglo XXI de Valparaíso. Significa unir la cima –en este caso Placilla y Curauma- con el centro de la ciudad, con la atención hospitalaria, el terminal de pasajeros, entre otros. El Valparaíso del futuro debe enfrentar dos desafíos: movilidad e innovación y emprendimiento”, indicó.

El municipio ha sostenido conversaciones con el área de concesiones del Ministerio de Obras Públicas, lo que se está abordando de manera conjunta con diversas entidades públicas.

EL METROCABLE DE MEDELLÍN

Finalmente, Jaime Pizarro, jefe de la Unidad de Planificación de la Municipalidad de Medellín expuso sobre el proyecto que se desarrolló en esta gran ciudad colombiana donde viven 6 millones de habitantes.

En Medellín se hablaba del metrocable en los años 70, pero no se consideraba viable. Sin embargo, en la década de los 80 se hizo el primer diseño de un cable pensado para el turismo.

“En los 2000 se esbozó el primer cable para una comuna que se encontraba aislada. A nivel mundial tienen una historia de más de 100 años y es uno de los sistemas que tiene menos estadísticas por accidentes. La topografía de Valparaíso es similar a la de Medellín, así que podría llevarse a cabo perfectamente”, concluyó Pizarro.

El sistema de metrocable de Medellín no solamente representa un avance considerable en el transporte de pasajeros, también reactivó los barrios en las ocho estaciones que posee el sistema y con el tiempo se levantaron nuevos espacios públicos mejorando ostensiblemente la calidad de vida de sus habitantes.