A dos años del megaincendio que afectó a siete cerros de Valparaíso dejando más de 12 mil damnificados, el fiscal Cristián Andrade -a cargo de indagatoria- puso fin a la investigación sin encontrar culpables.

Luego de indagar todas las líneas alternativas, la principal hipótesis sería la electrocución de dos aves. «Es altamente probable, pero no es 100% la causa», explicó Andrade al diario «El Mercurio», enfatizando que se investigaron todas las aristas del caso sin encontrar un responsable penal.

Las conclusiones contenidas en el informe realizado por los equipos especializados del OS-5 y OS-9 de Carabineros entregadas el 10 de febrero de 2015, ratificaron la idea inicial que los especialistas policiales se formaron al inspeccionar el foco donde se originó el incendio. Allí se encontraron, como una «anomalía», dos aves parcialmente calcinadas. Una estaba aún sobre un poste y la otra en el suelo, con un ala cercenada. La tesis es que habrían sido víctimas de un accidente eléctrico, que habría arrojado chispas o elementos incandescentes sobre desecho de tala de eucalipto.

Posteriormente se efectuaron diligencias que descartaron que el incendio hubiera partido en el vertedero o cerca del cementerio, confirmando que su origen fue en el fundo Los Perales. Asimismo en el lugar no se encontraron rastros de acelerantes o elementos que denotasen intervención intencional o de terceras personas.

La decisión de «no perseverar» del Fiscal será oficializada en una audiencia que será fijada durante esta semana.