Un carro con el cual vendían café y sandwichs era la actividad económica ideal con la que un hombre y su madre podían comercializar droga entre transeúntes que circulaban por el centro de Quilpué sin despertar ningún tipo de sospecha. Sin embargo, este procedimiento quedó al descubierto luego que ambas personas fueron detenidas por efectivos del plan “Microtráfico Cero” de la Brigada de Criminalística de la PDI de Quilpué.

Así lo confirmó el subprefecto Pablo González, jefe de la Bicrim Quilpué, quien entregó detalles del procedimiento que se gestó en el sector de Pompeya Norte –después de un mes de investigación- y que permitió recuperar 18 millones 400 mil pesos en efectivo, tres envoltorios con 26 gramos de clorhidrato de cocaína, elementos para el peso y la dosificación de drogas, y anillos de oro y gargantillas.

El detective explicó acerca de la forma de operar, que “la verdad es que ella dosificaba la droga en su casa, junto a su hijo, con quien deambulaba durante gran parte de la noche, ya sea por el sector céntrico, se desplazaba a los terminales de buses donde también trabajaban algunos colectiveros y también en el ambiente delictual o de algunos adictos vendía esta sustancia incautada. Son dos personas detenidas, ella pasó a control de detención, en cambio su hijo quedó apercibido al artículo 26 (del Código Proceso Penal)”.