Estas bodas han aumentado su popularidad en nuestro país, debido a que la mentalidad ha ido cambiando paulatinamente.

Christian González G.

Víctor Vicencio (37) y Jorge Miranda (28) celebraron una boda simbólica en Quillota.

Víctor Vicencio (37) y Jorge Miranda (28) celebraron una boda simbólica en Quillota.

Domingo 11 de enero en el Cautén, Quillota. Unas setenta personas aguardan paciente a los novios. De pronto, una música comienza tibiamente a llenar cada espacio de este campestre lugar. Tras unos segundos, los novios. Jorge Miranda, de 28 años y Víctor Vicencio, de 37, comienzan a caminar hacia el altar donde una joven los espera.

Semanas antes. En la casa que comparten en Viña del Mar, Víctor tomó por sorpresa a Jorge, su pareja desde hace dos años. Mientras festejaban el cumpleaños del primero de ellos, los invitados quedaron atónitos ante la propuesta de “matrimonio simbólico”. Así, todos los presentes vieron cómo se comprometieron. Y luego de la postura de argollas, quedó sellada la fecha donde solidificarían su amor.

La ceremonia

Pareja, que lleva más de dos años juntos, valoró aprobación del Pacto de Unión Civil.

Pareja, que lleva más de dos años juntos, valoró aprobación del Pacto de Unión Civil.

Pese a que la intención de esta pareja era realizar una ceremonia íntima donde sólo estarían invitados sus familiares y amigos más cercanos, la propuesta de matrimonio simbólico fue clave para que muchas personas se enteraran de la ceremonia. Y es que no sólo ellos se enteraron, sino que el boca en boca también creció, y hasta Quillota llegaron alrededor de setenta personas. De igual forma varios quedaron fuera.

La decoración del lugar fue al gusto de ambos. Las mesas, las sillas y el almuerzo. Al igual que la casa, que con piscina y en un ambiente totalmente natural recibió a los novios. Ya en la ceremonia, y vestidos completamente de blancos, Vicencio y Miranda caminaron hacia el altar donde los esperaba una de sus más entrañables amigas.

“Ahí nos recibió una amiga, que fue la que dirigió la ceremonia. Nos dio unas palabras, nosotros agradecimos y entregamos también nuestra visión de lo que ocurría. Fue algo súper lindo, y a la vez muy sencillo, donde quisimos hacer algo simbólico. Después nos hablaron los invitados, nos dieron sus palabras y bendiciones, así que fue algo tranquilo e íntimo, pese a que había harta gente”, contó Jorge, quien además aclaró que el evento fue absolutamente normal, ya que no querían hacer algo muy formal debido al calor reinante en Quillota.

Más frecuentes

Tal como esta pareja, muchas otras deciden formalizar su amor por medio de estas bodas simbólicas. De hecho, hasta sitios web ofrecen la organización del evento con todo incluido. Por ejemplo el portal www.losfiesteros.cl entrega el servicio de casas privadas, para al menos 100 personas, patio exterior, zona de recepción, bar y salones; garzones, los que pueden vestir atuendos temáticos; tragos de primer nivel; un juez de paz que da las bendiciones y lleva a cabo la boda, tal como si fuera un matrimonio heterosexual en una iglesia; entre otros servicios.

Estas bodas han aumentado su popularidad en nuestro país, según Jorge Miranda debido a que la mentalidad ha ido cambiando paulatinamente. “Los tiempos han cambiado, pero igual para hacer cosas así hay que atreverse porque igual se miran mal. Hay gente más conservadora que otra, pero nuestra familia y gente más cercana nos apoya. La gente nos quiere por lo que somos, no por nuestra opción sexual. Pese a esto, creo que ha cambiado la mente de la gente, pero aún falta”.

Pacto de Unión Civil

Ante esto, Miranda dijo que “en particular nos viene muy bien la aprobación del Acuerdo de Unión Civil, ex Acuerdo de Vida en Pareja, sobre todo para nosotros que nos consideramos una pareja estable y que esperamos durar por años. Creo que con ese pacto se podrá hacer algo más, principalmente en cuanto a la seguridad pareja, así que pienso que es algo positivo”.

Dificultades

Por último, se refirió a los problemas que se han generado últimamente en cuanto a la discusión del AUC y otros temas similares, que han envuelto a políticos y religiosos en algo que a juicio de Miranda le da mucha rabia.

“Lo veo en las noticias y nos da rabia. No sabemos cómo puede existir gente así. Por ejemplo lo del pastor Soto que no deja avanzar al mundo homosexual. Pero también hay políticos, así que nos da impotencia porque están el poder. Nosotros queremos lograr que se formalice, que sea legal para todos, pero pensando así no dejan avanzar”, finalizó.