proyecto 1 En el Salón de Honor de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso se efectuó el V Encuentro Internacional Alfa III-Spring de Responsabilidad Social (RS) el que busca generar oportunidades equitativas a través de intervenciones prosociales en las instituciones de educación superior.

El proyecto Spring busca desarrollar un modelo educativo de innovación curricular disciplinar y profesional para la RS utilizando una serie de metodologías de intervención prosocial que permitan un conocimiento recíproco y real de la diversidad social entre estudiantes, docentes y empleadores, colocando el foco en la formación integral desde los valores y el desarrollo de habilidades.

Entre las instituciones que participan de la propuesta liderada por la PUCV están: la Universidad Autónoma de Barcelona (España); Universidad Libre de Alemania; Universidad Autónoma Metropolitana (México); Universidad de las Américas (Ecuador); Universidad Nacional a Distancia (Colombia); Universidad Privada Domingo Savio (Bolivia) y Universidad de San Martín (Argentina). La iniciativa cuenta con financiamiento de la Unión Europea.

En la PUCV se está aplicando un modelo donde participan la Escuela de Ingeniería en Construcción, la Escuela de Ingeniería en Alimentos y la Escuela de Pedagogía, a través de Educación Parvularia. A futuro, la idea es integrar a todas las carreras.

En el V Encuentro Internacional, el vicerrector de Desarrollo, Arturo Chicano, planteó que el proyecto Spring es una de las propuestas más significativas en lo que respecta a la vinculación con el medio. “Como Universidad Católica no podemos estar fuera de la Responsabilidad Social. Es posible abordarlo desde la ética (…) Esta iniciativa nos lleva a repensar el rol que tienen las universidades en el mundo de hoy”, indicó.

Al respecto, Gladys Jiménez, profesora de la Escuela de Pedagogía y coordinadora general del proyecto Alfa Responsabilidad Social a través de Intervenciones Prosociales, agregó que a través de la RS se busca resignificar el sentido que tiene la formación universitaria sobre todo entre los jóvenes para que se comprometan con los sectores más vulnerables en sus respectivos países.

 “Las universidades son comunidades educativas que deben pensar su rol social respecto a su territorio. Deben formar no sólo profesionales, sino que ciudadanos socialmente responsables que den una respuesta desde el punto de vista ético a los grandes problemas que tenemos como la falta de justicia, la igualdad y la pobreza”, señaló.

La profesora Jiménez comentó que a los profesores de la Universidad Autónoma de Barcelona les llamó la atención el modelo chileno aplicado en América Latina, el que está más avanzado respecto a las instituciones europeas, donde recién se está planteando el ámbito de la RS.

“Es muy importante que la Responsabilidad Social se institucionalice en las instituciones de educación superior. Ojalá que esté en las políticas y no sólo que permee la formación a través de la docencia sino que también la gestión, la investigación (para qué y para quién investigamos), en la vinculación con el medio contribuyendo al entorno donde nos ubicamos”, agregó.

EL 15% DE LA POBLACIÓN VIVE CON MENOS DE UN DÓLAR DIARIO

El representante del Observatorio Regional de Responsabilidad Social para América Latina y el Caribe (ORSALC), Humberto Grimaldo, agregó que en América Latina existen más de 13 mil instituciones de educación superior, situación que contrasta con la realidad europea con cerca de 900.

Por otro lado, a nivel mundial alrededor de mil millones de personas viven con menos de un dólar diario, lo que representa el 15% de la población total. En ese sentido, las universidades deben ofrecer una mayor vinculación los sectores vulnerables.

“La Responsabilidad Social y Territorial debe entenderse como la razón misma de las universidades, que están llamadas a ser responsables por naturaleza, a comprometerse con las poblaciones vulnerables donde están insertas. Una universidad que no piensa en las poblaciones vulnerables es una institución que en América Latina carece de sentido. Una casa de estudios que crea élites sin un compromiso social tiende al fracaso”, advirtió.

El experto que colabora a través de UNESCO indicó que se han elaborado una serie de indicadores, los que se aplican a las instituciones de educación superior. “Una universidad que efectúa investigación de calidad pero lejana a los problemas de la realidad no es buena. Hay que trabajar para acabar con los índices de inequidad y de falta de oportunidades para la población”, complementó.

Sobre Spring, iniciativa que ha liderado la PUCV, el experto agregó que “es un proyecto que se mira con buenos ojos y queremos darle seguimiento para potenciarlo como parte de la agenda de la Organización de Naciones Unidas 2015 – 2030 dentro de las metas de desarrollo del milenio”, detalló.

En la ocasión, se efectuó el lanzamiento del libro “Formación en Responsabilidad Pro-social: Caminos Latinoamericanos de Innovación Curricular”, a cargo de la experta Gracia Navarro de la Universidad de Concepción.

El encuentro finalizó con la presentación de la colección digital Spring, la que fue realizada por Pilar Escotorín, exalumna PUCV y actual docente de la Universidad Autónoma de Barcelona.