dentalHace tres semanas Christopher, un adolescente de 14 años de la comuna de Cerro Navia, sufrió un accidente en bicicleta que le costó la pérdida de dos de sus dientes frontales. Durante días deambuló junto a su madre por varios consultorios y centros de salud de Santiago en busca de un especialista que lo atendiera. En el intertanto dejó de ir al colegio y no quiso salir más de su casa, por temor a las burlas de sus amigos y compañeros.

Cuando ya casi había perdido la esperanza, una dentista lo derivó a la Clínica Odontológica Pediátrica y del Adolescente de la Facultad de Odontología de la Universidad de Valparaíso, uno de los escasos centros de referencia en esa materia en el país, donde finalmente le reimplantaron los dientes que se le habían caído y hoy presenta una positiva evolución.

Algo similar le sucedió hace diez meses a Edison, un niño de 11 años que vive en Quillota y que se golpeó la boca mientras jugaba en una piscina. Su madre lo llevó hasta el consultorio local, donde no lo pudieron ayudar, pero le recomendaron ir a la clínica de la UV. Hoy luce una sana sonrisa, si bien continúa en rehabilitación.

Casos como esos revelan una realidad oculta: el alto impacto y la escasa atención que existe para los traumas dentales en escolares y adolescentes en Chile y en la Región de Valparaíso, pues uno de cada cinco niños de 12 años presenta algún tipo de fractura en uno o más de sus dientes y el dieciséis por ciento de los menores de entre 8 y 17 años de edad se ve seriamente afectado por avulsiones o pérdida total de alguna de sus piezas dentarias definitivas, producto de golpes provocados por accidentes o algún tipo de incidente violento.

“Este tipo de casos solo llama la atención cuando el afectado es un personaje público, como ocurrió días atrás con el jugador de fútbol Gary Medel, que perdió un diente durante un partido de la Selección. Pero la verdad es que es más común de lo que la gente cree. De hecho, en nuestro país, en general, y en esta región, en particular, la situación es preocupante. A nivel internacional está establecido que cuando el porcentaje de incidencia de las avulsiones supera el cinco por ciento se está frente a un problema de salud pública, y lo cierto es que acá esa cifra se triplica”, afirmó María Teresa Flores, directora de la clínica odontopediátrica de la Universidad de Valparaíso y una de las especialistas chilenas con más experiencia en la atención de este tipo de traumas.

Déficits

Desde 1996, junto al doctor Juan Eduardo Onetto -quien también es udental2n destacado odontopediatra, además de profesor en la mencionada facultad-, la doctora Flores ha atendido en dicha clínica a más de 2 mil 500 niños y adolescentes víctimas de este tipo de lesiones.

A ellos se suma un equipo de jóvenes odontólogos y residentes que realizan su especialización en Traumatología Dentaria, actualmente integrado por los profesionales Víctor Uribe Francisca Couve, Carolina López, Kiyoko Suzuki, y Lizandra Sánchez.

Según advierte la directora de la clínica odontopediátrica de la UV, uno de los principales problemas vinculados a los traumas dentales es la falta de información que existe sobre el tema, tanto a nivel público como privado, siendo que las avulsiones y fracturas forman parte de las Garantías Explícitas en Salud (GES) y, por tanto, los afectados tiene el derecho a exigir ser atendidos con los beneficios establecidos por el Estado para las urgencias odontológicas ambulatorias.

“A lo anterior hay que agregar la falta de especialistas, pues la Odontopediatría es una especialidad poco fomentada y valorada por la mayoría de las escuelas de Odontología a nivel nacional”, acotó la doctora.

Riesgo y primeros auxilios

Otro aspecto que preocupa a María Teresa Flores es que con la llegada de la primavera y durante el verano, estaciones que coinciden con un mejor clima y las vacaciones de los escolares, se tiende a producir un incremento de los casos de fracturas y pérdidas de piezas dentales.

“Como los niños juegan y corren más, andan más en bicicleta o patines y nadan en piscinas, el riesgo de sufrir este tipo de lesiones aumenta significativamente, por lo que desde ya hago un llamado a las mamás y los papás, y a las autoridades en general, a ser precavidos y a cuidar más de nuestros niños en esta época”, comentó.

Por lo mismo, entregó una serie de recomendaciones -previas a acudir al dentista-, que definió como “primeros auxilios” para quienes deban enfrentar un caso de trauma dental.

Al respecto, indicó que cuando se produzca la caída de un diente definitivo, este debe tomarse por la corona o parte visible. Luego debe recogerse y llevarse de inmediato a su posición original y sujetarlo con un pañuelo. Si no se puede hacer eso, lo mejor es introducirlo en la boca del afectado, entre la mejilla y los molares, o en un vaso con la propia saliva de este último. Y si eso tampoco fuera posible, en un vaso con leche.

Clínica Odontopediátrica

La Clínica Odontológica Pediátrica y del Adolescente de la Facultad de Odontología de la Universidad de Valparaíso está ubicada en calle Francisco Valdés Vergara 652, frente al parque Italia. Brinda atención odontológica integral a niños y adolescentes, dando prioridad a pacientes pertenecientes a familias vulnerables o de escasos recursos, al tiempo que ayuda especializada en urgencias y seguimiento de lesiones traumáticas dentarias.  Más información en el 32-2508690 o en el sitio www.facultadodontologiauv.cl/stdi/