FOTO 1Un monto cercano a los $4.000 millones es lo que hasta el momento ha invertido ENAP en las faenas de limpieza y mitigación que ha llevado adelante para recuperar cuanto antes los sectores afectados por el derrame de crudo, ocurrido en la bahía de Quintero el 24 de septiembre, producto de un error de maniobra entre el buque LR Mimosa y el remolcador Puyehue, en un proceso de descarga.

ENAP ejercerá todos los recursos legales pertinentes para determinar al responsable final del derrame, con el fin de que se haga cargo, tanto de los daños ambientales y sociales para la comunidad afectada, como de los costos que ha significado para la empresa y el daño provocado a su imagen corporativa. El Juzgado de Quintero ya acogió la solicitud de arraigo presentada por ENAP contra el buque Mimosa, hasta que se determinen todas las medidas de prueba que permitan establecer claramente lo ocurrido y las responsabilidades.

“Desde el primer momento, ENAP ha asumido, en coordinación con la autoridad marítima y el gobierno, las labores de contención, limpieza y mitigación de las consecuencias del derrame”, señaló Claudio Luengo, Jefe del Terminal Quintero de ENAP. Las labores de limpieza -que están próximas a terminar en su fase terrestre y marítima- han incluido cuadrillas, que en su punto peak alcanzaron las 1.200 personas, entre los que se cuentan los pescadores artesanales y la comunidad afectada, quienes han sido contratados por ENAP para apoyar las labores de limpieza en Quintero, Loncura, Ventanas y Horcón, además de todas las lanchas disponibles en la bahía. Del monto total invertido hasta el momento, cerca del 40% corresponde a la contratación para labores de limpieza de pescadores, embarcaciones y personas de la comunidad afectada.

La fase de limpieza marítima y terrestre hasta el momento ha significado la disposición de residuos de crudo de más de 2.000 tambores, a cargo de la empresa especializada Hidronor.

“A pesar de que la fase de limpieza está prácticamente terminada, hemos decidido continuar con dos semanas de monitoreo y respuesta ante eventuales reapariciones de trazas de crudo”, señaló Marc Llambías, Gerente de Refinación y Comercialización de ENAP.

“Asimismo, tenemos un diálogo permanente con los pescadores, la comunidad y las autoridades locales, de modo de atender sus legítimas inquietudes, de acuerdo al mandato de nuestro Directorio y la solicitud de las autoridades. Además, también queremos ser un aporte a la solución del grave problema general que afecta a la zona de Quintero a lo largo de los años”, agregó.

Paralelamente y en forma inmediata, ENAP dispuso todos los recursos disponibles y un equipo de especialistas, liderados por el Dr. Pablo Salah, director del Centro Veterinario de la Universidad Santo Tomás de Viña del Mar, para el control, evaluación y recuperación de la avifauna de la bahía de Quintero afectada por el derrame. También contrató especialmente a la Dra. Valeria Ruoppolo, miembro del IFAW (International Fund for

Animal Welfare), médico veterinaria brasileña que ha participado liderando el rescate animal de múltiples derrames de hidrocarburos en el mundo (Sudáfrica, Ecuador, Noruega y México). Hasta la fecha se han rescatado 43 ejemplares.

Asimismo, ENAP entregó ayer un informe a la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC) y a la Capitanía de Puerto con el volumen final del crudo vertido, estimado en 22 m3, de acuerdo al informe técnico encargado a la empresa independiente, ABS Consulting, a solicitud del Directorio de la estatal. Esta consultora, con sede en Houston, Texas, es una de las principales empresas en las áreas de evaluación de riesgos, administración de la seguridad de los procesos y modelaje de peligros.

En conferencia de prensa, los ejecutivos de ENAP a cargo de las labores en Quintero, dieron a conocer las medidas, estudios y planes ambientales que se están desarrollando, junto a los diversos expertos contratados en los distintos ámbitos. La jefa de Medio Ambiente de Refinería Aconcagua, Silvana Ogalde, detalló los monitoreos en terreno, que incluyeron la toma de muestras, a cargo del Laboratorio Silob. Adicionalmente, ENAP contrató a la Facultad de Ciencias del Mar y Recursos Naturales de la Universidad de Valparaíso, para una segunda fase de muestreos.

En línea con el compromiso con la sustentabilidad y con una mirada de largo plazo, ENAP ha decidido establecer una estrategia de evaluación ambiental para identificar: áreas de manejo de pesca, áreas de concesión de pesca, de importancia ambiental, zonas prioritarias y zonas de interés turístico. Este levantamiento será sistematizado a través de una Plataforma Informática, que será puesta a disposición del municipio de Quintero, la Autoridad Marítima y de la comunidad.