En la conferencia de prensa posterior a la derrota de España frente a Chile, el seleccionador español, Vicente Del Bosque, admitió la superioridad del equipo de Jorge Sampaoli, que dejó fuera al campeón de Sudáfrica 2010.
 
Spain-s-Vicente-del-Bosque-fol_54352530493_54115221152_960_640«Hemos estado 25 días con un trabajo adecuado, creíamos que estábamos en buenas condiciones. Todos estaban muy bien pero la realidad ha sido otra. El primer tiempo contra Chile y el segundo contra Holanda han sido una losa en toda regla», analizó.Sobre el partido contra Chile propiamente tal, Del Bosque señaló que «en el primer tiempo nos quitábamos el balón de encima, y eso a Chile le permitía una presión. En el segundo tiempo nos ha podido la presión. Hemos caído, hemos sido inferiores. Hay que pensar en el futuro y nada más».

Enfrente, por otra parte, había un gran rival: «No quiero repetirme. Chile ha sido fiel a lo que esperábamos de él. Actividad física tremenda, coraje, valentía… Hizo el primer gol y eso todavía le dio mayor estímulo y emoción. Han jugado con agresividad y a nosotros nos han ido minando. No creo que los jugadores se hayan entregado. Han luchado hasta el final. Hemos intentado revertir el resultado, pero no hemos podido. Lo del rival no lo digo para que lo recibais bien, sino desde la sinceridad. Es un equipo muy hecho, bien trabajado, con una actitud encomiable… Será un rival complicado para cualquiera».

«Hemos jugado dos partidos y no hemos sido capaces de ser superiores. Nos sentimos dolidos»

Del Bosque, de cualquier modo, aún da vueltas a lo sucedido: «Si pienso en los 25 días que llevamos juntos, en el trabajo, en la convivencia del grupo, en el espíritu… no me hubiera creído que íbamos a quedar eliminados en la primera fase. Otras veces ves un equipo entregado, pero no era el caso».

El inquilino del banquillo español, por lo demás, sabe que el país está triste tras una debacle que nadie esperaba: «Es cierto que en estos días, desde el partido ante Holanda, hemos tenido una suma de mensajes siempre positivos, de afecto y simnpatía, pero naturalmente hoy es un día triste para todos, para ellos, los que los enviaban, y para nosotros, que lo estamos sufriendo en primera persona. Lamentamos no haber podido dar una satisfación y es tiempo de pensar en el futuro»

Finalmente, el DT no quizo hablar del futuro de la selección española ni del suyo propio, y sostuvo que «hay que hacerlo sin calma. Tendremos tiempo para hacer las cosas que son mejores del fútbol español».