En total 800 voluntarios de ambas iglesias llegaron hasta los cerros afectados con el incendio para contribuir a la reconstrucción

fotos 155De manera organizada y con las pilas puestas llegaron temprano esta mañana hasta los cerros siniestrados alrededor de 800 voluntarios pertenecientes a las iglesias Mormonas y Evangélicas para trabajar en la construcción de viviendas.

Se trata de un trabajo mancomunado y coordinado entre la Municipalidad de Valparaíso y ambas iglesias que además del levantamiento de casas contempló labores de retiro de escombros y de clasificación en centros de acopio.

Son 550 mormones y 250 evangélicos, quienes acompañados de prevencionistas de riesgos y dotados de herramientas e implementos de seguridad, colaboraron en la reconstrucción de Valparaíso este fin de semana.

Destacando la importancia de levantar las viviendas lo antes posible por la baja en las temperaturas, el alcalde de Valparaíso, Jorge Castro, sostuvo que “esta es la organización del trabajo que hemos realizado durante la semana. Dijimos que íbamos a entregar una cantidad importante de viviendas de emergencia, especialmente a aquellas familias que están durmiendo en carpas y en malas condiciones. Nos preocupaban esos damnificados y por eso nos organizamos de tal manera de avanzar rápidamente. Formamos grupos desde iglesias mormonas y evangélicas hasta voluntarios del DuocUC y de la Asociación Chilena de Municipalidades”.

El presidente de la Iglesia Jesucristo de los Santos de los Últimos Días en Valparaíso, Helgi Hukdhs, señaló que “desde la noche misma del incendio hemos estado trabajando en distintas cosas. En terreno con un promedio diario de 300 personas, ayudando a los afectados, en el centro de acopio y ahora estamos levantando las viviendas. Hay profesionales del área técnica y social trabajando en la construcción de las viviendas, así ayudamos de manera más completa”.

Por su parte, el pastor Moisés Salinas, presidente de la Coordinadora Evangélica Regional, expresó que “todas las iglesias evangélicas unidas estamos tratando de ayudar a las personas que lo perdieron todo el incendio pasado. Y nosotros también nos vimos afectados, pues sólo en Las Cañas hay 64 familias de nuestra iglesia damnificadas. Así que estamos abocados a ayudar en todo lo que podamos. La idea es trabajar junto con el municipio que nos está dando todo el respaldo para trabajar como corresponde para ir en beneficio de quienes necesitan ayuda”.