medicamentosPreocupación existe en el Colegio de Químico Farmacéuticos y Bioquímicos de Chile por la tramitación del proyecto de ley conocido como “Ley de Fármacos”, dado que para esta tarde está previsto que sesione la Comisión Mixta que revisa los últimos detalles de la iniciativa que modifica el Código Sanitario en materia de medicamentos.

Según señaló el presidente nacional del gremio, Mauricio Huberman, “como profesionales de la salud consideramos que el país requiere en forma urgente de una política de medicamentos coherente, centrada en el bienestar del paciente, y donde se reconozca al medicamento como un bien social y no de consumo como ocurre hoy en nuestro país”.

Cabe señalar que el proyecto de ley introduce la venta de medicamentos en locales comerciales en los que no se contará con supervisión de un profesional farmacéutico (artículo 129). Esta idea ya fue rechazada por la Cámara de Diputados y la Comisión de Salud del Senado, pero el Gobierno anunció que insistirá para que sea repuesta, lo que podría ocurrir esta tarde cuando se discuta en Comisión Mixta.

El dirigente también afirmó que la liberación de venta de remedios va en sentido contrario a las políticas adoptadas por países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) –del que Chile es miembro–, los cuales aumentan sus estándares de dispensación por medio de oficinas de farmacia y a cargo de un profesional farmacéutico.

El Colegio de Químico Farmacéuticos estima que la liberalización de la venta de medicamentos fuera de las farmacias no soluciona el problema de acceso de la población. De acuerdo a las estadísticas que han recopilado gracias a la acción de las farmacias móviles en algunas regiones del país, “podemos asegurar que la venta directa representa menos del 10% del listado de fármacos esenciales, y el 80% de las necesidades de las personas corresponden a medicamentos de venta con receta médica. Por lo tanto, ampliar la distribución de los remedios de venta directa a otros locales comerciales no soluciona el problema de acceso”, sostuvo Huberman.

El gremio de profesionales químico farmacéuticos considera que la problemática del acceso a remedios, pasa por una deficiente gestión del Ministerio de Salud, a través de la Central Nacional de Abastecimiento (CENABAST), para asegurar que los fármacos que gratuitamente debería recibir la población estén disponibles en la atención pública de salud (hospitales, consultorios, SAMUs, SAPUs y postas rurales). “Esta negligencia por parte de la autoridad obliga a las personas a desplazarse y comprar sus medicamentos en las farmacias, aumentando el gasto mensual del presupuesto familiar para la población de bajos recursos”, señaló Patricio González, presidente de la Delegación Regional Valparaíso del Colegio de Químico Farmacéuticos.

Respecto de la supuesta disminución de precios que traería la venta de remedios fuera de las farmacias, González fue enfático en señalar que “en las condiciones actuales, la distribución en más canales no asegura una baja de precios, debido a que productores e intermediarios distribuidores son los mismos. Ellos continuarán gobernando los precios, independiente de que la venta la realice una farmacia, un almacén, botiquín o cualquier otro lugar. Por tanto no habrá beneficio económico para los pacientes”.

Por otro lado, estiman que la liberalización de venta de medicamentos implica un claro riesgo para la salud pública, por cuanto los productores y distribuidores no competirán ampliando la distribución, sino aumentando el consumo mediante estrategias de marketing. Así, junto con aumentar el “gasto de bolsillo” en fármacos para la población más vulnerable, se observará un rápido aumento del gasto en salud como consecuencia de un mayor número de hospitalizaciones y consultas por intoxicaciones, reacciones adversas, interacciones o enfermedades por el mal uso y abuso que originaría la liberalización de remedios, como ha sido el caso en otros países que han dado pie atrás a estas medidas por sus nefastas consecuencias, tal es el caso de Argentina y Paraguay hace un mes atrás.

El dirigente regional del Colegio de Químico Farmacéuticos dijo esperar que en la tramitación del proyecto “prime el interés por el bien común y la salud pública y no los intereses de los grupos empresariales que son los únicos que se verán beneficiados con la venta de medicamentos fuera de las farmacias”.

Finalmente, el gremio hace un llamado a los parlamentarios “a no ser engañados por los argumentos falaces del Ministro de Salud para que se aprueben todas las modificaciones al Código Sanitario, que lo único que busca es legislar sobre el mercado farmacéutico para beneficiar a los supermercados y el retail bajo un prisma sólo económico, disfrazando lo anterior al incorporar algunos conceptos farmacéuticos como bioequivalencia y fraccionamiento, los que pueden ser resueltos mediantes un simple reglamento. El Ministerio de Salud ha engañado y tratado de confundir a la opinión pública por los medios de comunicación durante estos últimos meses. La medida de fondo y que encubre el Ministerio no tiene ningún fondo ‘sanitario’ ni menos la búsqueda del bien común de la población chilena”.