Este martes comienza a regir la ley que pide nuevas exigencias para las personas que quieran ser parte del Registro de No Donantes, las cuales ahora deberán presentar una escritura pública o un documento protocolizado ante notario.

Esto modifica la anterior legislación, la cual estipulaba una declaración simple, la cual tiene un precio de 500 pesos, para formalizar su intención de no ser considerado donante, o bien, para aquellos que por error fueron inscritos en el listado, que a la fecha considera a 3,8 millones de personas que no quieren que sus órganos sean donados.

Sin embargo, este lunes la Corte Suprema entregó nuevas instrucciones a los notarios sobre los trámites requeridos para ser parte del Registro de No Donantes, donde un documento privado notariado costará 5.900 pesos, mientras que un usuario deberá desembolsar 8.400 pesos en el caso de una escritura pública.

“Los documentos tendrán un número y se incorporan al registro de escritura pública que deben guardar los notarios. Esto queda archivado y, además, la Corte Suprema estableció un plazo de 48 horas para que las notarías informen al Registro Civil de cada caso”, explicó a La Tercera Armando Arancibia, presidente de la Asociación de Notarios, Conservadores y Archiveros Judiciales de Chile.

La flamante legislación deja sin efecto la consulta realizada en el Registro Civil al momento de renovar la cédula de identidad, ya que se considera a todos los chilenos mayores de 18 años como donantes de órganos, a no ser que se manifieste lo contrario ante notario.