Valparaíso ha sido azotado por dantescas tragedias durante el último tiempo, siendo los más presentes en el colectivo ciudadano el incendio del 14 de febrero y la rotura de la matriz en la subida Santa Elena de la Ciudad Puerto. Muchos otros hechos han quedado un tanto en el olvido por el simple hecho que ya han pasado varios años desde ocurridos; tal es el caso de la explosión en la calle Serrano, donde aún no existe sentencia respecto a las responsabilidades de lo ocurrido aquella mañana de febrero del 2007.

Serrano2Leonardo Contreras es uno de los abogados que está asesorando a los trabajadores que se quedaron sin su fuente laboral tras la emergencia de hace seis años, quien asegura que muchas veces las personas afectadas tienden a llegar a acuerdos rápidos con las empresas para evitar llegar a procesos largos y engorrosos que los tienen sin soluciones hasta ahora; mientras que los que optan por tomar acciones civiles deben esperar años para que se pueda llegar a obtener una condena por las responsabilidades.

 

Muchas veces la gente olvida estas tragedias significativas por lo largo de los procesos. ¿Por qué tardan tanto estos casos?

«Cuando sucede una catástrofe o algo que les produzca un daño y se den los supuestos para iniciar una demanda civil existen dos opciones: cuando la empresa es monopólica, cuando tiene poder económico suficiente para hacer frente a una negociación, se puede llegar a acuerdos, que es la vía más fácil, pero donde muchas veces no se satisfacen las necesidades de los afectados; lo otro, es iniciar una acción civil o una acción penal acompañada de una civil, que es la que más optan los abogados porque tienen más tiempo y facilidad para valerse de las pruebas e ir detrás de la responsabilidad. De todas maneras, ahí se cometen muchos errores porque es un proceso engorroso y lento, que podría durar hasta 12 años. Normalmente si nos sujetamos a la ley, eso debería durar un año, pero hay hechos que se van debatiendo en el transcurso de un juicio que van alargándolo, como una prueba que sea falsa o que los peritos trabajen en ello».

 

¿Entonces se podría decir que el caso de la calle Serrano está dentro de los márgenes normales?

«Absolutamente. Está dentro de los hechos de estas características».

¿Y en qué estado se encuentra actualmente ese proceso?

«La calle Serrano tiene tres grupos de personas: las que experimentaron la muerte de algún familiar o daño físico, que en su mayoría llegaron a acuerdos con las empresas; están los (13) propietarios de los locales que iniciaron acción civil, los que ya están esperando el fallo; y están los (23) trabajadores que fueron indirectamente afectados, que perdieron su fuente laboral. Ellos llevan seis o siete años en el proceso, y recién este año pudieron hacer efectivos los seguros que los favorecían. Es porque son muy largos estos procesos, que mucho llegaron a acuerdos por mucho menos de lo que les iba a corresponder si llegaban a juicio».

¿Qué es lo que se espera y para cuándo?

«Los propietarios este año tienen que sacar un fallo y ellos esperan que se condene a estas empresas que tienen responsabilidad en los hechos. En el caso de los trabajadores es más complicado porque el daño es indirecto, ya que no acreditan propiedad. Probar su daño es mucho más complicado pero lo que se espera es que también se condene a estas empresas; de todas maneras, lo más seguro es que apelarán, se presentarán recursos de casación, y ahí se alarga unos tres o cuatro años más».

¿Cómo ha visto a los afectados durante estos últimos meses?

«Estuve con los trabajadores hace un tiempo y los vi muy desesperados porque la defensa de las empresas alargan y alargan el procedimiento. Además, la estrategia de las empresas es dilatar el pago, entonces eso es lo que causa desesperanza en las personas. Fue esto mismo lo que llevó a muchas personas de la rotura de matriz en la subida Santa Elena a llegar a acuerdos rápidamente porque las personas necesitan llegar a soluciones rápidas».

Rotura de matriz

Justamente en esta otra tragedia, ¿en qué se encuentra actualmente?

«Acá también hay grupo de personas que tomaron decisiones distintas: los propietarios tomaron la decisión de iniciar una querella criminal por daños, creo jurídicamente que no ha sido lo más apropiado porque el delito de daños difícilmente llevará a un juicio oral donde se interpone una demanda civil para recuperar las cosas materiales; y hay otro grupo de personas de seis personas que nosotros asesoramos y que perdieron todo. Acá llegamos a acuerdo, lo que fue mejor porque si hacíamos una acción civil o en causa penal tendríamos que esperar mucho, así que conseguimos la indemnización adelantada lo que satisface las necesidades inmediatas».

Uno de los casos más emblemáticos en esta tragedia fue el de la señora Roxana Muñoz, a quien la están sacando de su hotel, ¿qué pasa con ella?

«A ella se le había dado un plazo perentorio para salir del hotel, que era un acuerdo que  habíamos llegado para el miércoles pasado. El tema de ella es delicado porque no era dueña, entonces la dueña le dijo que no volviera porque se quería deshacer de la propiedad, la que tenía cedida gratuitamente de por vida por favores. Lo que hemos hecho nosotros, fue elaborar un indemnizado de los puntos que se necesitaban reparar, como enseres. No tomamos el daño moral en consideración para presentarlo en una propuesta a Esval para encontrarnos en una negociación rápida y accesible. Se llegó a acuerdo que satisfacían las necesidades de la señora Roxana, pero hoy nos encontramos que en el trabajo más que jurídico-social de buscar un lugar para que ella se pueda establecer y estamos trabajando en eso».