• El Epicentro constató severas diferencias de opinión entre miembros de la jerarquía católica en nuestra zona respecto de la crisis por la que atraviesa la institución.
  • El 2011 la Universidad Diego Portales realizó una encuesta que medía la credibilidad de la Iglesia Católica y ésta arrojó una importante caída en confianza social hacia la Iglesia Católica ya que en el 2010 el 42,9% tenía bastante o mucha confianza en esta institución, mientras que el año 2011 sólo se alcanzó el 24,1%.
 Por Chantal Garay Soto chantal.periodista@gmail.com
A lo largo de la historia, la Iglesia Católica ha sido por siempre la religión con más fieles en el mundo ya que por años ha expandido su doctrina. Antes era más fácil decirse católico y así lo hacía un 69,7% de los chilenos. Hoy Ud. lo piensa antes de afirmarlo y así es como bajaron los católicos que se reconocen como tal, lo cual mitiga la credibilidad de la institución. El 2010 el 42,9% tenía bastante o mucha confianza en esta institución, mientras que el año 2011 sólo se alcanzó el 24,1%, según una encuesta de la Universidad Diego Portales.

Con el paso de los años, nuestra sociedad comenzó a evolucionar, se secularizó y los fieles comenzaron a vivir su fe de manera personal y casi oculta. Sin embargo, lo que vino a empeorar este escenario fueron hechos de abusos sexuales cometidos por clérigos que usufructuaron de su condición de sacerdote que por años la Iglesia cultivó para cometer abusos de diversas índoles lo cual desató la crisis actual que vive la Iglesia Católica.

Sin embargo, a pesar que el mismo papa Benedicto XVI reconoció la nube negra que se posó sobre la institución y que aparentemente llegó para quedarse, no todos los clérigos asumen esta verdad.

JESUITA: “ESTA CRISIS NO ES TAL”

  • El Epicentro conversó con diversos religiosos de la zona para conocer sus puntos de vista sobre el tema.

Sergio Elizalde, sacerdote jesuita de nuestra zona, lo único que nos señaló cuando acudimos a su entrevista fue que “esta ‘crisis’ no es tal, ya que una verdadera crisis se vivió en la época de la Reforma de la Iglesia Católica cuando ésta hundía sus raíces en elementos de la tradición católica medieval”. Luego, cuando se le preguntó por los hechos de pedofilia ocurridos en la Iglesia Católica, se defendió diciendo que “los hechos de pedofilia cometidos por sacerdotes, son hechos aislados, como los que cometen los bomberos, periodistas, carabineros, etc, es un problema universal”, puntualizó.

Según un texto que se vio la luz luego de la Conferencia Episcopal, celebrada en el 2007 en Brasil y que dio origen al texto “Aparecida”, la misión principal de los evangelizadores según el vocero de la Conferencia Episcopal de Chile –CECH- Jaime Coiro fue “recomenzar  desde Cristo, esto significa, entre otras cosas, que el anuncio del evangelio no es sólo copiar y pegar, por eso debemos dar testimonios y de eso tenemos mucho que aprender, para que los fieles vuelvan a nosotros”,  señaló.

Pero, si recomenzar desde Cristo significa evangelizar como lo hacían los antiguos cristianos ¿la postura del padre jesuita no debería ser, quizás, más humilde, más transparente y menos agresiva?.

Distinta es la postura del sacerdote salesiano y párroco de la Iglesia Don Bosco, Patricio Álvarez, quien sí asumió que existe una crisis al interior de la religión católica, de la cual él también forma parte. “Hay muchos alejados de la Iglesia, por lo tanto, sí hay una crisis que tiene que ver con adhesión y pertenencia, una crisis que tiene múltiples o diversas explicaciones, pero es un hecho que la Iglesia contaminó a nuestro país y lo que se ha venido produciendo es un porcentaje de los hechos y uno se da cuenta que progresivamente va disminuyendo el número de personas que se declaran católicos en Chile”, reconoció y agregó que “en Valparaíso sólo un 16% se declara católico, según encuestas internas de su congregación”.

SACERDOTES SCHOENSTATT: “ES DURO PERO DEBEMOS ACEPTARLO”

 Por su parte, el sacerdote Schoenstatt, Jaime Gayangos también reconoció que “sin duda como Iglesia estamos enfrentando una crisis, no tan mayor como las históricas, como la reforma o la Inquisición, pero sí, estamos frente a una crisis, esto es posible medirlo con las encuestas que hay al respecto, ya que debido a los hechos de pedofilia cometidos por algunos sacerdotes, la red de protección que hay por dentro de la Iglesia, el silencio que se mantuvo como institución, es algo absolutamente cuestionable y entiendo que los laicos como la gente que está alejada de la religión se distancie aún más como consecuencia de los actos de algunos clérigos. Es duro, pero tenemos que aceptarlo, si lo hizo el sumo pontífice, ¿por qué nosotros no?”, dijo Gayangos.

Quien también niega tajantemente la existencia de una crisis, es el padre Claudio Ortiz, rector del Seminario Mayor San Rafael de Lo Vásquez, ya que nos respondió vía email que “(el decir) que la Iglesia está en crisis, es un concepto que la verdad, nunca he compartido, ya que no están en duda los fundamentos de la Iglesia”, especificó.

Decir que la Iglesia está atravesando una  crisis como institución, mas no de fe es una realidad como ciudad, como país y a su vez mundial. A pesar de todos los hechos en los que se han visto involucrados sacerdotes bajo las acusaciones de abusos sexuales, de poder, de silencio, obra u omisión no ha disminuido la creencia en Dios, pero sí ha afectado la credibilidad y confianza en la Iglesia Católica.

A su vez se puede atribuir la baja en la pertenencia a la Iglesia Católica al hecho de que la fe hoy se vive de manera distinta a como la vivían nuestros abuelos. La fe de los feligreses se está viviendo desinstitucionalizadamente, pues el creyente ya no está necesitando un intermediario en su relación con Dios, ya que ahora se comunica directamente con él. Todo esto puede ser una consecuencia del proceso de secularización que está viviendo la sociedad.

El proceso de secularización significa, que vuelve a su lugar lo que tenía que estar en su lugar, por lo tanto, como lo dijo el mismo Galileo Galilei, a la Iglesia no le toca decir cómo es el cielo, sino le toca decir cómo uno se va al cielo, en un sentido figurado, por lo tanto, ese proceso ya está en marcha por lo menos hace dos siglos y es un proceso positivo según el sociólogo porteño, Carlos Basualdo, pero que tiene como toda cosa su arista negativa y esto es el secularismo, es decir, “la presunción de desarraigar la experiencia de la fe y de lo religioso como pilar de la cultura, en los países y la civilización de este momento, que es de alguna manera el esfuerzo y el empeño que tienen varios movimientos y organizaciones a nivel mundial que han influido poderosamente las comunidades económicas”, señaló. Un ejemplo de esto, es lo que ocurre en las comunidades europeas, que en algunos países del viejo continente ya no se coloquen objetos religiosos de cualquier tipo en las paredes, o lugares públicos, por lo cual existe una negación de Dios.

Abusos en Valparaíso

Anteriormente mencionábamos que a la baja de fieles se suma, la poca credibilidad que tiene la población en la Iglesia católica, producto de las redes de protección a los sacerdotes vinculados con escándalos sexuales. Así es el caso del obispo de Valparaíso, Gonzalo Duarte, quien tiene un proceso canónico en su espalda, pero en el que una vez más se terminó beneficiando al victimario y no a la victima.

Este es el caso, del actual obispo protestante, Mauricio Pulgar, que sufrió abusos por parte de clérigos desde los 13 años en distintas ciudades de nuestra región.

Pulgar inició un juicio canónico y legal paralelamente contra los sacerdotes vinculados con sus abusos. Pero recientemente el juicio legal se vio truncado, ya que la justicia se declaró  “incompetente”, pues luego de la reforma procesal penal, no tienen competencias para poder tratar estos temas. Ante esto, debió derivarse el caso automáticamente a la “justicia antigua”, la cual permitiría poder investigar estos hechos,  “se nombra un ministro en visita y éste lleva a cabo la investigación, al igual que en el caso Karadima, pero claramente aquí están esperando que se cumplan los plazos y el caso prescriba”, sentenció el obispo protestante.

Si hechos como estos, no son esclarecidos ante la opinión pública, es difícil el futuro para el credo católico. “Los abusos sexuales por parte de los sacerdotes, le dio en las pelotas a la Iglesia Católica, porque mató el único capital que tenían los “hombres de Dios”, su credibilidad ya casi no existe y tratar de ocultar hechos y no procesar a los involucrados, solo por responder a un circulo de protección gigantesco, terminará alejando cada día más a los fieles que aún queden en esta institución”, manifestó el sociólogo Carlos Basualdo.

El escenario actual que vive la religión católica, es complejo y tanto los mismos sacerdotes como fieles se niegan a aceptarlo. Cuando una Iglesia que se ve fuertemente amenazada por una sociedad directa y muy distinta a la que nuestros padres y abuelos un día conocieron, esa misma que hoy es capaz de cuestionar el discurso que domingo tras domingo, escucha de aquella figura de largas sotanas blancas parada sobre un altar. Han provocado la caída, y la emigración de files a otras religiones, ya que creer o no creer ya no es el problema, ahora se cuestionan los medios de cómo llegar al verdadero mundo que existe más allá de las promesas de un paraíso, más allá del edén.

Opiniones sobre el tema

Para Noelia, una muchacha de 23 años, ex católica, siente que la iglesia  la defraudó, “yo no creo ni creeré de nuevo en una institución donde los sacerdotes están manchados por la asquerosidad y el morbo de sus silencios”, sentenció.

Agregó a su vez, que la religión de hoy es muy distinta comparada con antaño, “hoy siento que la gente cree en esto por necesidad, por no sentirse a la deriva, por los temblores, los terremotos, por miedo, la gente se aferra a una creencia para darle sentido a su vida. Y las religiones aprovechan esto para poder sacarles dinero y poder mantener sus templos, capillas, etc”, disparó esta dolida creyente.

¿Podrías volver a confiar en los sacerdotes?

“No. Los sacerdotes que cometieron delito son delincuentes, y los que se callan y sabían, son cómplices y merecen un castigo por omisión.  No puede ser que Karadima pueda comulgar y una persona porque convive con otra sin estar casados no puedan,  basta de que la iglesia apoye estas aberraciones y no apoye el uso de preservativo por ejemplo”.

 

Pastor Evangélico, Mario Verdejo.

Para el pastor bautista de la Iglesia Maranatha de El Olivar, Mario Verdejo, la culpa no recae sólo en un sacerdote que provocó estos hechos, y tampoco se ciega al ver que en su credo también han tenido casos de abusos, pero reconoce que esto se debe saber afrontar, “esto es responsabilidad de toda la institución, porque la participación de los involucrados debe esclarecerse”, comentó.

Referente a la pérdida de fieles, entre ellos a los jóvenes que no admiten estos escándalos y que están cada vez más alejados de Dios, explicó que para ellos, el doctrinar a sus fieles desde la niñez es fundamental, porque según explicó “la Iglesia Católica ha hecho mal su pega, porque no ha impregnado a los jóvenes con su mística. En el caso de nosotros (evangélicos) sí lo hemos hecho. Por otra parte, en relación a Dios es verdad que yo me las arreglo solo y no necesito a Dios, eso es una profecía bíblica, que está en el antiguo testamento y la Biblia dice que habrá gente que hablará contra Dios, que habrá guerras y lucharán hijos contra padres y eso lo estamos viendo”, sentenció el pastor que reconoce que muchos fieles católicos se van a sus filas, buscando orientación luego de los hechos “dolorosos” para muchos de los creyentes de Dios.

 

Foto: , Héctor Flores, El Mercurio,